Pues mi mujer se salió con la suya y me hizo pasar por las salas de cine para ver esta película romántica Irlandesa, pero lo más curioso de todo es me ha gustado. Qué tiene esta película que la hace buena? Su realismo, nos encontramos ante una película que muestra personas de verdad y eso es muy agradable de ver.
Brooklyn nos cuenta la historia de Eilis Lacey, una chica irlandesa que se siente vacía en su pueblo natal irlandés. Un sacerdote amigo suyo le consigue un trabajo y una casa en Nueva Yorky ella le lanza a la aventura. Allí conocerá a Toni un simpático chico italiano que se enamora de ella casi al verla. Todo parece ir bien en Nueva York hasta que se ve forzada a volver a su casa en Irlanda, allí de nuevo le asaltarán las dudas, ¿qué vida es mejor la de la nueva tierra o la de su querida Irlanda.
Esta película aborda dos temas: las dificultades de emigrar y el amor. Ambas tratadas con un respeto y un cuidado digno de lo importantes que son ambos. El primero de ellos es lo cuesta arriba que se le puede hacer a una persona buena, el cambiar todo en su vida, dejar familia y pueblo por compañeras de piso y la gran ciudad. El ritmo de Nueva York no acepta sentimentalismos y vencer la nostalgia es algo que sólo puede hacer uno mismo. A través de Eilis conoceremos todos esos sentimientos y cómo con el tiempo se pasan.
El otro tema que veremos en esta película es el amor y el matrimonio. Eilis conoce a Toni, un chico italiano que la corteja como lo habríamos hecho cualquiera, recogiéndola en sus clases al terminar. sacándola a cenar, una relación sana y que lleva la dirección que toda relación debería llevar. Cuando Eilis viaja a Irlanda, en su pueblo forzarán un romance con Jim, un chico de buena familia, con dinero y simpático que luchará por cortejarla con la máxima tranquilidad. Eilis dudará entre ambos, pero no tanto porque esté enamorada de ambos sino porque estar en casa le hace sentir una familiaridad que no siente en Nueva York.
En su estancia en Irlanda es donde veremos la lucha entre el cariño que siente por lo que nos ha criado, frente al que se siente por el que se ha trabajado. Puede no se fácil distinguir entre amor y nostalgia, así como puede no ser fácil saber qué es lo que un quiere cuando la familiaridad te nubla.
El estilo es clásico y muy limpio y por eso no es una película especialmente llamativa visualmente. Pero encontrar una película donde el retrato de las personas es tan realista y todo podría pasar, sumado a los dilemas personales que plantea hacen que esta película sea una interesante opción para descansar, relajarse y disfrutar. Quitando al público adolescente, que no la entenderá (un chico de mi sala de cine se quedó dormido jiji) creo que es una película dejará buen sabor de boca.
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