Ha pasado tiempo, lo sé, pero es que cuando un producto no gusta, apetece poco dedicarle tiempo. Pero creo que es bueno dejar claro cuándo un producto es un fiasco. Así que hablemos de otra de esas series fallidas de Amazon. Un producto que ya podemos sumarla a la lista de la rueda del tiempo y Los anillos de poder, como despilfarro inútil.
Citadel es la gran promesa de espías de amazon. Un intento de mezclar Misión imposible con los Kingsman. Citadel es una agencia de espionaje que está por encima de las naciones y las normas y como siempre tiene su cruz de la moneda, una agencia del mal que tampoco obedece ningún orden mundial. La serie nos planteará, como en misión imposible, como Citadel está al borde de la extinción de no ser por sus dos mejores agentes «Mason Kane» y Nadia Sinn. Deberán recorrer un camino juntos para descubrir qué les pasó y quién traicionó a quién.
Infantil, es el adjetivo que para mi gusto mejor define a esta serie. Diría que esta serie intenta construir a una pareja de espías al de nivel y lo único que deja es la sensación de ridículo. No hay ninguna construcción de personajes, sencillamente vemos a dos personajes que si luchan juntas son indestructibles y que son más inteligentes que TODO el mundo. Resulta tan poco creíble que como espectador sientes que están tomando el pelo. Lamento decir que no he sido capaz de conectar con ellos, me he sentido hasta un poco insultado, de ver que me tendría que gustar algo que roza lo ridículo.
La producción tampoco ayuda mucho. Una base en medio del desierto, planos boca abajo para ir de original, escenas de acción al estilo comando. De nuevo tienes la sensación de que hay intento de originalidad pero no llega. La puesta en escena no ayuda a lo plano de su argumento y por eso no entiendo que su presupuesto se haya disparado por encima de los 200 millones de dólares para de 6 episodios de 20 minutos cada uno. No sé si se han gastado el presupuesto en viajes, o en colorear las escenas, pero no funciona.
Se supone que tras los mandos están los hermanos Russo, pero tarda uno poco en darse cuenta de sólo son los productores. Después de ver «El agente invisible» es evidente que los responsables de Infinity War o End Game, saben crear un personaje y dominan a la perfección las escenas de acción. En esta serie se percibe lo opuesto, desinterés total por sus personajes y escenas de acción propias de un estudiante de cine.
En fin, creo que mi descontento es bastante evidente y más si encima os cuento que el final no puede estar más abierto, como si eso fuese a servir para que veamos la segunda temporada. Por lo que a mi respecta, se pueden ahorrar el dinero.
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