Ayer ví «El alacrá enamorado» y me gustó tanto, que he pensado que debía decir al mundo por milésima que nuestro cine es bueno y que hay que quitarse ese prejuicio de «Es que esta película es española». Hace mucho tiempo que el cine de la casa es fantástico. Pero si hace poco ha sido noticia por los recortes que está sufriendo, la verdadera noticia es que esta semana pasada el 50% de nuestras recaudaciones las ha dado el cine patrio. Lo mejor, que no han sido películas de aquellas que sólo nos daban bostezos. Alex de la Iglesia con sus brujas ha sido un número uno rotundo, en segundo lugar hemos tenido a la loca Boda futbolera y en tercer lugar la aventura animada de Antonio banderas. ¡Qué pedazo de resultados tan merecidos!  Sólo he podido ir a ver una de ellas, que me encantó, pero bien pagaría la entrada de las otras dos si tuviese algo más de tiempo.

El cine español cada vez regala más interés, regala trabajos bien hechos, en los que priman historias algo más elaboradas y una elegancia que no tiene nada que envidiar a lo que viene del otro lado del atlántico. Sirva de ejemplo otra de las películas que dará que hablar «Zipi y Zape y el club de la canica» de la que tan sólo he leído una crítica de un diario Norteamericano, que la alababa profundamente. No sé si será un poco infantil, pero desde luego ves el trailer y el pego lo da más que de sobra.

Hace poco se ha sabido que Envíariamos a «15 años y un día» como nuestra candidata a los oscars, a pesar de tener a «La gran familia española» o «caníbal» como posibles candidatas. Pero lo cierto es que los premios nos importan poco, lo que realmente nos importa es que una película nos entretenga, que nos deje buen sabor de boca, que nos haga disfrutar. Pues bien, estamos ya en eso. No podemos criticar a nuestro de cine, de cutre, ni de poco elegante. Tenemos que reconocerlo como lo que es, un cine que se acerca al espectador. Un cine que busca entreterle.

Y por eso, desde aquí digo a la industria que los recortes no deben preocuparles, porque cuando se hacen películas como las que se están haciendo, no hacen falta subvenciones, porque los espectadores hacemos el esfuerzo de pagar esas carísimas entradas y pasamos por las salas, sólo tenéis que hacer una cosa, seguir así.

(No Ratings Yet)

Cargando...