Tenía muchas ganas de poder dedicarle un post a Kimetsu No Yaiba. Cuando vi la primera temporada me encantó (personalmente creo que es de los mejores animes de los últimos años y está seguro en un top 5 personal). Pero en aquel momento lo tuve que comprimir en un post con otros grandes animes dado que no había tiempo para poder dedicarles a cada uno lo que realmente se merecía. Hoy, y sirviéndome de excusa de poder haber ido al estreno de la película de Kimetsu No Yaiba, El Tren Infinito, podré dar mis impresiones tanto de la primera temporada como de la película adaptadas por Ufotable y traída a España por Selecta Vision.
La historia de Kimetsu No Yaiba se puede decir que no aporta nada nuevo al género. Tiene la clásica estructura de historia shōnen de peleas entre jovenes con potencial contra demonios de diferente clase que se van complicando cada vez más. A medida que se van superando dificultades y enemigos el protagonista crece y se hace más fuerte. Esta definición nos suena, historia como Naruto, One Piece y otras tantas viven de este tipo de argumento, aportando sus matices particulares a la historia, pero Kimetsu No Yaiba tiene algo que la hace especial. Veamos si consigo trasladarlo.
Kimetsu No Yaiba (o como se conoce en España, los Guardianes de la Noche) es una historia que transcurre en la era Taishō de Japón (principios del siglo XX), donde disfrutaremos a nivel visual de un Japón tanto rural como del urbano. Kamado Tanjirō es un joven que se gana la vida vendiendo carbón. Un día, después de volver del pueblo, descubre un día que su familia ha sido asesinada por un demonio. Y no solamente eso, su querida hermana Nezuko, con la que tenía un vinculo más especial se ha convertido en demonio. Para poder salvar a su hermana y vengar a su familia Tanjirō decide convertirse en un cazador de demonios y esta decisión le abrirá un mundo desconocido y terrorífico con el que tendrá que pelear hasta las últimas consecuencias.
Obviamente la premisa con la que se plantea la historia es la venganza de Kamado Tanjirō sobre Muzan Kibutsuji, el demonio original. Muzan es el responsable de haberle hecho esto a su familia, un ser muy poderoso que va cambiando de forma para no ser descubierto. Para ello, el viaje de Kamado Tanjirō va a contar de diferentes etapas, en la que cada una va a estar tutelada por algún responsable del Cuerpo de Exterminio de Demonios, una organización fuera del gobierno con la misión de luchar contra todo tipo de demonios, con el objetivo último de derrocar a Muzan Kibutsuji y su élite de Lunas Demoníacas. Giyu Tomioka le muestra el camino de la espada, Sakonji Urokodaki le entrena durante dos años en la respiración del agua y promueve el ascenso a Cazador de Tanjirō en la Selección Final (uno de los momentos más bonitos de la serie, ¿gracias a la aparición de Sabito y Makomo?).
A partir de ahí el nivel de los retos de Tanjirō, Nezuko y sus dos nuevos compañeros, Zenitsu e Inosuke solamente hará que crecer. El nivel de los demonios a los que tendrán que enfrentar irá creciendo, la pelea contra Rui (Quinta Luna Demoníaca) en el momento zenit de la temporada y comenzar a ver los detalles de la organización de Cazadores de Demonios, así como la introducción de los diferentes pilares y de Ubuyashiki Kagaya, líder de la organización, abre las puertas a una historia que solamente hará que mejorar. A veces luminosa y a veces muy oscura, la ancestral pelea entre la vida y la muerte (hombres versus demonios) cobra forma en el sentido de que la muerte, a veces, nos es más que un salida, en vez de un fin. Ufotable lo recrea de manera magistral.
Como podemos ver, sigue mucho de los cánones establecidos para las historias de tipo shōnen. Escrita por Koyoharu Gotōge, el 15 de febrero de 2016 comienza a publicarse en la revista semanal Shūkan Shōnen Jump, Kimetsu No Yaiba ha cosechado muchísimos éxitos, Anime del Año 2020 por Crunchyroll, mejor protagonsita (Kamado Tanjirō) y mejor combate. En este punto es imposible no recordar el capítulo 19 de la primera temporada, donde en la batalla de Tanjirō contra la Quinta Luna Menguante de Muzan, Rui, la serie despliega todo su arsenal tanto a nivel argumental como de belleza visual y acustica. Una obra de arte sin duda y que merece ser repetida varias veces.
Y es que los puntos de la serie son estos precisamente. El nivel de Ufotable ya era conocido, con adaptaciones como las de la saga Fate/Zero, Fate/Stay o la saga de Tales of Zestiria, con Kimetsu No Yaiba el nivel técnico y de animación es muy notable, casi perfecto. Si además de eso le unes la excelente banda sonora de Go Shiina en la que combina perfectamente los coros de un Japón feudal con la acción necesaria para cada episodio, el resultado es esta obra de arte que hemos podido disfrutar tanto en casa como en el cine. Mención especial es el la lírica puesta por Nami Nakagawa en ‘Kamado Tanjirō no Uta’ para el episodio 19.
Después de dos años de espera (culpa de la pandemia), Ufotable trajo de nuevo la continuación directa de la historia en modo de película. En este caso, se vivirán los eventos del arco titulado del Tren Infinito, donde veremos la lucha de nuestro grupo de protagonistas conjuntamente con el Pilar de Fuego (Kyojuro Rengoku) en una película amena, divertida y alegre, pero a la vez dramática y triste. Si bien es cierto que vamos a centrarnos otra vez en la pelea de Kamado Tanjirō, el protagonista sin lugar a dudas es la figura de Rengoku. De la historia de su familia, de la promesa que le hizo a su madre y de su responsabilidad como Pilar.
Es tal el impacto que ha tenido Kimetsu No Yaiba en el país nipón que creo interesante reflejar dos datos. El primero es una encuesta realizada por la ANN (Anime News Network) a 7661 niños en Japón. En ella se puede comprobar el curioso resultado de que Kamado Tanjirō más admirado por los niños y niñas de entre 8 y 12 años que los propios padres. Es cierto que estamos ante un personaje único donde se combinan un hecho terrorífico, pero sus cualidades harán que sea imposible empatizar con él enseguida. De gran olfato y buen corazón, Kamado Tanjirō ha conseguido encandilar a propios y a extraños, sólo hace falta ver el orden de las respuestas de la encuesta de ANN:
- Kamado Tanjirō
- Mi madre
- Shinobu Kocho
- Mi profesor
- Mi padre
- Giyū Tomioka
- KamadoNezuko
- Kyōjuro Rengoku
- Zenitsu Agatsuma
- Muichiro Tokito
El segundo dato para ver el impacto de Kimetsu No Yaiba reside en el éxito en taquilla que ha tenido la adaptación de Ufotable con la película de Mugen Ressha-hen. Volviendo a nuestros amigos de la ANN, la pelicula de Kimetsu no Yaiba ha logrado el hito do colocarse como número 1 en ventas de la historia de la animación japonesa superando al la película de Hayao Miyazaki ‘El Viaje de Chihiro’ con casi más de 400 millones de dolares de ingresos. Todo un éxito teniendo en cuenta que prácticamente se ha recaudado unicamente en el mercado japonés. Es ahora cuando está abriendose al mercado internacional, cosa que no hará que consolidar su posicionamiento como película japonesa más taquillera de todos los tiempos.
Si eres un apasionado de la animación es imposible no sentir la llamada de Tanjirō seguir disfrutando de la excelente historia de Gotōge adaptada por Ufotable. Si todavía nos has visto la serie, hay que ser valiente y dar un paso adelante. Sin duda el conocer la historia de Kamado Tanjirō y vivir el viaje del Tren Infito merecen la pena. Con la segunda temporada ya confirmada, solamente hay que deshojar la margarita para esperar que Ufotable nos vuelva a deleitar con esta historia.
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