Por cortesía de Sensacine, tuvimos la suerte de estar en el preestreno de la entrega, la nueva película de Michaël R. Roskam y que tiene un detalle muy especial la interpretación del difunto James Gandolfini que murió en Junio del 2013 algo que me ha hecho pensar mucho sobre el rodaje de esta película ¿cuándo fue? ¿porqué tardó tanto?
La entrega nos cuenta la historia de Marv y Bob (tío y sobrino) que trabajan en un bar que sirve de «caja» para el dinero de los bajos barrios de Nueva York. Toda la trama se dispara cuando este bar recibe un atraco en el que el dinero de la mafia desaparece. Marv y Bob se verán en un lío que tendrán que resolver si quieren seguir con su apacible vida.
La película está basada en una historia corta de Dennis Lehane que inspiró películas como «Adiós pequeña adiós» o «Mystic River» de modo que os podéis imaginar el ritmo de la película, desde mi punto de vista es más parecida a «Adiós pequeña adiós» donde la historia avanza lentamente y conoceremos a sus personajes y el sentido de todo muy poco a poco. La historia va ganando interés minuto a minuto pero va a pasos tan lentos que a más de uno se le haría pesado. Creo que está bien contar historias distintas pero se ha pasado de original, no me han gustado los personajes, parecen todos gente que no sobreviría en un mundo como este, no piensan y sólo tienen pinta de besugos creo que es ahí donde la película falla.
El otro punto fuerte es el reparto, por una lado tenemos a James Gandolfini en un papel en el que siente cómodo, el de mafioso, no es de extrañar que la película le salga sola. Por otro laod está Tom Hardy, quien para mi gusto repite el papel que interpretó en Lawless pero en tiempos modernos, no me ha gustado su personaje, parte la tiene el guión pero mucha otra la inactividad con la que lo caracteriza creo que con alguien un poco más listo la cosa habría cambiado. Por último está Naomi Rapace cuyo personaje también es desesperante, esta con Hardy se llevan el premio a conversaciones de besugos en la cinta y es una pena siendo los dos tan buenos como son.
En resumen, me parece la típica película para ver en casa un día que estés muy relajado y no quieras andarte con historias, es mejor que la media de las películas domingueras pero está por debajo de sus predecesoras, no creo que el tiempo la guarde como una gran obra más allá de que es la última que veremos de Gandolfini.
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La entrega, un lejando recuerdo de «adiós pequeña adiós» http://t.co/6jfJrgtMwO