«Primos» me pareció una película un poco tonta y sin rumbo y no mejor no hablemos de «Gordos» la famosa pelicula de Arévalo aguantó 15 minutos en mi televisión, no dudé un segundo en quitarla, menudo rollo. Pero algo prometía de esta película desde que vi el primer trailer y la cosa mejoró infinitamente cuando según se fueron habiendo pre estrenos las críticas eran muy positivas y todo el mundo salía contento. Así que a pesar de que el fin de semana no pude ir al cine ayer mismo pasé por la sala y vi esta película.

La gran familia española no cuenta un día en una casa del campo. Efrain, el hermano pequeño de una peculiar familia, celebra su boda en el mismo lugar y con la misma edad su padre a quien admira, sólo hay un cambio ha coincidido con la final de la copa del mundo. Lo cierto es que la película no gira en torno al partido lo más mínimo pero es un recurso más que el director maneja con bastante arte.

Sencillamente la película me ha encantado. Tengo que reconocer que he estado todo el día de hoy pensando en ella porque es una película tremendamente profunda. Creo sin duda que la gran genialidad de esta película es que es una película muy profunda disfrazada de comedia y eso es algo que pocas veces sale bien. Aunque el trailer, la pinta y la historia parecen apuntar que vas al cine a reírte, en realidad vas a disfrutar de una historia familiar llena de detalles muy originales y en la que cada personaje tiene un rol muy distinto pero todos son importantes.

Dicho eso, la gran familia española no tiene un protagonista tiene muchos y además ninguno tiene nada del anterior. El éxito de eso, que no es fácil, es por una parte del reparto. Un equipo de actorazos que se salen cada uno en su sitio, me ha encantado la representación de Quim Gutiérrez y Antonio de la Torre, como hermanos mayores. Qué guapa sale Verónica Echegui y qué bien representa a la novia tierna , Roberto Álamo haciendo de hermano con retraso está que se sale, Miquel Fernández en su papel de hermano enamorado con compledo de inferioridad, Patrick Criado como el novio adolescente que está más perdido que ni sé, Héctor Colomé como el padre de familia (Papelón) es impresionante, transmite mucho carisma, y por último las guapísimas Arancha Martí y Sandra Martín, enamoran, consiguen que te sientas como el protagonista no sabría a cuál elegir.

Pero como decía, no sólo el reparto coge con maestría esta historia, su director nos cautiva con un montaje espectacular y como pocas veces lo hemos visto en el cine. Empieza y cierra con «7 novias para 7 hermanos»  nos regala escenas desternillantes en las que se mezclan conversaciones que encajan a la perfección, nos regala una profundidad inmensa,  creo que volveré a ver la película sólo para apuntar todas frases que me hicieron pensar ¡qué bueno! También nos regala mucho amor y sobretodo, revivir aquel momento del gol de Iniesta, ese segundo de nuestra vida en el que nuestros problemas no tenían importancia, el mundo se para  y sólo importaba la alegría de ser una nación campeona. Durante ese momento de la película es como vivirlo de nuevo.

He disfrutado mucho con esta película, la recomiendo ciegamente, es otra de esas películas que me servirá para defender que el cine español no es malo y que tenemos casos de películas geniales que pueden hacerte pasar un buen rato.

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