La momia 3
No sé muy bien cómo me han convecido para ver la tercera parte de esta saga después de lo poco que me gustó la segunda. El caso es que me animé y la ví, me gustó bastante más que la segunda y bastante menos que la primera, es una película que se queda a medio camino, muy de ahora, poco argumento y muchos efectos especiales (aunque más logrados que su predecesora).
La película lo de siempre, tenemos a nuestro amigo Rick O´conell, que tiene que ir a China a salvar a su hijo, ya bastante mayorcito, de las garras de la momia de un emperador chino muy poderoso en su época y atormentado por un amor que nunca consiguió. El humor está presente en toda la película y el cuñado de Rick vuelve a ser lo más divertido de la película por ser el único que no quiere saber nada de momias. El escenario una China, muy de moda ahora gracias a los juegos olimpicos, que la verdad es que nunca defrauda en cuanto paisajes y estética.
En balance un festival de entretenimiento con unos protagonistas exageradamente sosos y un malo increíblemente aburrido y falto de carisma. Una película entretenida pero con un tema muy mal aprovechado.
Hellboy II: El ejército dorado
Tengo que reconocer que la famosa frase de » las segundas partes nunca fueron buenas» es una frase que toca comerse con patatas al ver la secuela de Hellboy. El demonio rojo está tan fabuloso como siempre y su humor y chuleria apenas han cambiado. Pero esta ver se ve reforzado por un mundo fantástico,excelentemente creado, lleno de bichos raros, criaturas mágicas, mostruos muy feos o graciosos.
La idea es brillante, en la antigüedad se creó un ejército de máquinas tan letal que fue desterrado al olvido para evitar sanguías, el príncipe de los elfos harto de ver cómo los seres humanos malgastamos nuestras vidas se propone hacerse con él para hacerse el dueño del mundo.
El villano es excelente, por no ser un villano cruel y despiadado sino un hombre que no está deacuerdo con el mundo y quiere poner remedio y ahi es donde entra el «anti» héroe Hellboy para hacerle ver que el fin no justifica los medios. Una película brillante.
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