Da gusto cuando encuentras una serie fresca, divertida, que tiene intriga y elementos fantásticos. Todo esto es lo que tiene Ragnarök. Un auténtico descubrimiento. Este lanzamiento de Netflix ha sido toda una novedad, acaparando la atención de los suscriptores y se ha reportado que Ragnarök ha ocupado la posición número como la producción televisiva más vista. Con lo que por lo menos habrá que darle la oportunidad si no te convence los argumentos.
Toda la acción se desarrolla en Edda, una ciudad situada en Noruega y mezcla temas tan actuales como el cambio climático y la contaminación industrial con la mitología nórdica. Por poner un poco de contexto, el Ragnarök es la batalla del fin del mundo. Esta batalla será emprendida entre los dioses, los Æsir, y los gigantes. El protagonista es Magne, un chico que vuelve a casa después de unos años viviendo fuera, y va descubriendo poco a poco que va naciendo dentro de él unos poderes que no controla.
Si que es cierto que en Ragnarök tenemos los clásicos estereotipos. Tenemos al inadaptado, un friki, la chica guapa, el personaje LGTB, el popular y el listillo, pero eso no te impide disfrutar de la serie en un contexto de un guion original y que va ganando en fuerza a medida que van pasando los capítulos. Si que es cierto que hay algunos momentos que las tramas pueden flaquear y no acabar de contar todo lo que pudieran. No se terminan de explotar las relaciones o las acciones de tantos dioses como los gigantes, que espero que sea razón de que nos lo harán disfrutar en las temporadas posteriores. En esta primera temporada como yo lo veo es que nos han dejado las semillas para poder irlas descubriendo, para un majestuoso final de temporada donde todo estalla.
Ragnarök intenta abarcar mucho, y va sembrando para las temporadas venideras. Las primeros episodios son muy interesantes, y tiene esa capacidad de dar giros que sobrecogen, pero esa mezcla que propone entre la high school movie, el cine de superhéroes y la actualización de las leyendas mitológicas, puede que no acabe de enganchar a todo el mundo. Y mi por ejemplo, si lo ha hecho, aun no gustándome su aire adolescente. Por otra parte, ya sólo por la ubicación merece la pena verla, los paisajes son espectaculares, pudiendo disfrutar de los fiordos en toda su profundidad, y la banda sonora de varios artistas, como M83, que no defrauda.
Son 6 capítulos de aproximadamente 45 minutos de duración cada uno. Yo me quedaré aquí sentado, esperando la segunda temporada, porque a mí si me ha gustado, aunque la crítica sea muy exigente.
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Sin duda, tu crítica apunta más al no verla que al sí. Estuvimos a punto de empezarla pero el trailer hizo gala de poca factura técnica y nos echamos para atrás. Veré si le damos una oportunidad.
La verdad es que releyendome yo tampoco la vería. Habrá que editarlo. La factura técnica es colosal y la fotografía sublime, yo le daría una oportunidad.
[…] Solamente para aquellos insensatos que no le dieron una oportunidad a la primera temporada, en Ragnarok Season 1 ya dejé mi […]