Ya ha pasado algo más de medio mes desde que colgué el post sobre el ferviente estreno de Shutter Island. Pues bien respondiéndome personalmente a la pregunta de: ¿será tan buena como la pintan? He de decir que sí. Me pareció una gran película. Es increíble que durante la misma no sepas realmente lo que está pasando. Consiguen que te pongas en la piel de Teddy (Leonardo di Caprio) y sufras con sus temblores, sus visiones, su interminable lucha por la supervivencia.

Los momentos de tensión son buenos, la lluvia y la música (quizás lo que a mi menos me gustó de la película, aunque tampoco me disgustó), ayudan a crear ambientes trágicos y fríos. Me sorprendió muchísimo que por fin en una película los ratos de miedo, más bien de nerviosismo, no se consiguiesen dejándolo todo a oscuras en el que tan sólo se viesen sombras y fogonazos de luz. No, aquí las escenas están trabajadas y en todo momento sabes lo que está pasando. Uno de los puntos fuertes a mi parecer.

Asimismo, Leonardo di Caprio hace un gran papel, aunque para mí el dueño de la película es Ben Kingsley que interpreta el papel del psiquiatra Cawney. Me gustó el hecho de no saber si era un buen médico o un psicópata enfermizo hasta que no acabó la película. Pero también he destacar que los actores secundarios hacen sus pinitos y que el decorado, el maquillaje y la vestimenta, realmente te hacen sentir como en un lugar de criminales chiflados.

Aunque hemos tenido dificultades para llegar a la sala, la primera vez nos desviamos hacia otra película en el último momento, hemos conseguido verla por fin. Y de verdad, merece la pena.

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