Hay que reconocer que cuando quieren hacer las cosas bien, se hacen muy bien. El quinto capítulo de esta temporada se puede considerar como el más completo que se ha hecho en toda la serie, contando tanto la primera como la segunda temporada. Al menos hasta este momento. Ojalá mantengan este nivel porque este es el camino con el que los fans hemos soñado desde que anunciaron la serie. Las tramas que se presentan en su punto de madurez optimo, y es una gozada disfrutarlas de esta manera.
No tiene nada que ver con el capítulo anterior, ya que las tramas que presentan no tiene ninguna continuidad con éste. Este capítulo vendría a ser una continuación del tercer capítulo, que terminaba con la forja de los anillos de los enanos. Ahora veremos el resultado de ese experimento y el efecto que tienen sobre Durin III, el rey de Moria. Me ha parecido muy interesante la forma de insinuar el Daño de Durin, luego lo comentaremos.
Lo que me ha parecido magistral ha sido la trama de Eregion. Sauron ya está muy metido en la cabeza de Celebrimbor. Los 7 anillos de los Enanos se han forjado, su plan está en marcha, y sus tentáculos van a extenderse más allá del maestro herrero de Eregion.Es un maestro en maldad y los gestos de Charlie Vickers mientras va esparciendo la cizaña es una obra de arte. ¡Cómo ha hecho crecer al personaje su interpretación! La amenaza llama a la puerta de Eregion y los Elfos no presentan el frente tan unido que requiere la situación.
Una de las tramas que mejora sustancialmente respecto a lo que nos habían enseñado es la de Númenor. Honestamente me temía lo peor, después de lo visto en el tercer capítulo y su forma de acabar la coronación de Ar-Pharazôn, tan simple y burda para los que se suponían que eran la raza de hombres más desarrollada de la Tierra Media. Aunque luego lo comentaremos, la división que comienza a arreciar en la Isla de Númenor va a coger tintes épicos.
En lo técnico la serie vuelve a estar sobresaliente. Los planos que se muestran de Eregion y Númenor son una obra de arte. No ha habido serie que en lo técnico brille tanto. Tampoco se queda corta la presencia imponente que da la montaña en la Mina de Moria. Me ha encantado el capítulo, es el mejor de la serie. Planea la multiculturalidad por todos lados, los emisarios de los enanos, los herreros elfos. Es curioso como no hay una raza que no tenga todo el espectro de posible de subrazas representadas. Aún así, no se hace de forma ten evidente y lo compensa con un sólido argumento y una maravilla visual.
- Pero vamos con el análisis, tened cuidado porque entramos en zona peligrosa:
- Trama de Moria
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El capítulo comienza de la mejor manera posible y por donde queríamos. Vemos los 7 Anillos de los Enanos ya forjados y en manos de Durin. Ya desde el principio vemos que el capítulo es de categoría, ya que el primer detalle que nos dejan de esta trama es uno de los que pudimos ver en el Señor de los Anillos, que es el de la influencia que pueden tener los anillos en los portadores. Esa forma tienen los anillos de susurrar al oído de Durin, toda una declaración de intenciones por donde irán los derroteros del episodio.
Además de la influencia que tienen sobre el señor Enano, vemos el poder que le otorgan. En este caso la representación como la solución del problema de Moria, que es la falta de sol. El anillo va a a superar las capacidades de las cantantes de piedra e indicará a los Enanos donde cavar para poder recuperar la tan ansiada luz. Pero no todo es oro lo que reluce en las Minas de Moria. Durin IV todavía sigue con la mosca detrás de la oreja sobre los anillos, ya que hay cosas que ha visto en su padre que no le hacen ser el mismo.
Los efectos del anillo, además de su poder y su influencia en el Enano, se hacen visibles. Un ejemplo es la escena en la que el Rey pierde momentáneamente el anillo mientra está analizando el plano de las Minas. Muy parecido a cuando Gollum o Bilbo pierden el anillo y lo buscan con desespero. La frase que mejor resume este estado la dice el propio Durin: ‘el anillo hace que la mano pese más’. Otro ejemplo es la escena en la que Durin IV atribuye a la influencia del anillo a la actitud y avaricia que ha adquirido su padre.
La avaricia de Durin se muestra también en el momento en el que se convocan a los emisarios de los 7 Reinos de los Enanos para hacerles entrega de los Anillos. Aquí se introduce una diferencia con la obra de Tolkien ya que los anillos fueron forjados en Eregion por Sauron en su forma de Annatar y fue el mismo el que se los entregó a los 7 señores por igual, sin distinguir a Durin, el cual podríamos decir que era como el caudillo de todos los enanos. En este caso, es Durin el que extorsiona a los Enanos obligándolos a un pago por el uso de los anillos. Una muestra del efecto del anillo sobre el Rey.
Esa avaricia que comentaba también puede llevar al colapso de la montaña. El descubrimiento accidental que tiene Disa al perseguir la gema que compra en el mercado lleva a una divertida escena que tiene un final aterrador. Algo se mueve en la montaña, y no creo que los temblores que han vivido los enanos sean precisamente provocados por el Orodruin, sino por algo todavía más peligroso. Tengo muchas ganas de ver al Balrog salir del escondite y provocar el hundimiento de la ciudad Enana. Aunque Durin hijo avisa a su padre, de momento el anillo le ciega. Ya sabemos que es demasiado tarde…
Es una de las tramas que mejor han tratado respecto a lo que nos dejó Tolkien en sus escritos. Me había echado a temblar con el hecho de que los señores enanos fueran los que se muestran en la mesa en el momento que presentan los anillos. Que hubiera señoras enanas de cualquier color era una de las cosas que me esperaba de la serie, aunque lo han encubierto bien diciendo que son solo emisarias. Well done, Amazon Prime. Tengo ganas de ver como evoluciona esta trama, de largo la mejor de la temporada pasada, y que ha mantenido el nivel en esta temporada.
- Trama de Eregion
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La trama de Moria, como hemos visto, está muy relacionada con la trama de Eregion. La amistad de Enanos y Elfos se va a ver acrecentada con los anillos. Y los elfos, de cara a asegurar el envío de mithril por parte de los enanos, van a seguir haciéndoles regalos. Celebrimbor nos descubría el ithildin hace un par de capítulos, y de cara a entender la amistad entre el elfo y Durin, las famosas puertas de Moria, aquellas que tan imponentes se mostraron en La Comunidad del Anillo, se muestran como el regalo primigenio que fueron. Son estos los detalles, como la forma de llamar a los ‘amigos’, que están haciendo grande a esta temporada.
Démonos cuenta de lo potente que es esta trama. Sauron, en su forma de Annatar, está obsesionado con su plan. Va conociendo el arte de la forja de los anillos. Y ‘necesita’ hacer los anillos para los hombres. Aun dejando de lado la manera en que catalogan a los segundos hijos de Ilúvatar, como rebajan su condición en comparación a elfos y enanos. Me encanta la forma en la que va infiltrándose en la cabeza de Celebrimbor. En vez de coincidir con el gran elfo en la tendencia a la corrupción de los hombres, le habla de los grandes héroes: Tuor, Eärendil, Beren. Le hace dudar, e incluso le reta a que si Celebrimbor no quiere forjarlos, él mismo los hará. No es bien así en los libros, pero la forma en la que lo cuentan poco se puede argumentar en contra.
Lo que sí coincide con los libros, y enlaza muy bien en la trama de Númenor, es el momento en el que Sauron confiesa, en plena discusión de si los hombres merecen los anillos, que teme a Númenor. En los libros todavía no lo conocía, ya que Númenor no se rebelará hasta que Sauron saca a sus huestes y es derrotado y encarcelado por los hombres de la isla. Visto lo que ocurre en Númenor en este capítulo, creo que esa historia le han querido dar la vuelta y nos la van a explicar de otra manera.
Pero no solamente se va a meter en la cabeza del Celebrimbor. La influencia de Sauron va a crecer hasta meterse en la cabeza de todos los elfos que ayudan al señor de Eregion. Un ejemplo es como se dirige a Mirdania, ganándose su confianza comparándola con Galadriel. Es un maestro del control mental, y va tejiendo su red de alianzas, poco a poco. Vemos como comienza la forja de los 9, introduciendo novedades en los anillos. Vamos a ver como introducen el poder de hacerse invisible. La elfa Mirdania, que ayuda a Sauron en la forja, es la que se pone por accidente el anillo. Y describe lo que vio Frodo al ponerse el anillo en la taberna de Bree. Frío, oscuridad, un mal creciente y un señor tenebroso que lo gobierna todo.
Ahí es cuando a Celebrimbor se le encienden todas las alarmas. ¿Más mithril? ¿Qué persigue Annatar? Por suerte, o por desgracia, aparece Durin el joven, hablándole de la influencia que está teniendo el anillo en su padre. Lanza su sospecha sobre Annatar, que el herrero elfo hace suya también. Pero está teniendo una lucha interna. Los anillos son su obra final, y pesará más eso que hacerle caso a su intuición. Annatar ya posee a Celebrimbor, que baila a su voluntad. Las dudas corroen al elfo, y la escena final en la que se deja llevar por la tentación de seguir fabricando su obra.
‘Siembras semillas en mentes ajenas y consigues hacer ver que es obra de un mismo’. Son las palabras que resuenan en la cabeza de Celebrimbor cuando ya ha dado rienda suelta al orgullo provocado por Annatar. Sauron se ha metido tanto en la cabeza del forjador elfo que le ha convencido a si mismo de que la obra de los Anillos de Poder es su obra, cuando en realidad es la obra del Señor Oscuro. Los 9 van a ser forjados para completar a los 3 anillos de los elfos y así permitir, según el elfo, corregir el defecto que se ha detectado en los 7 anillos de los enanos. Todavía no percibe el alcance de su fracaso.
La escena final nos deja a los Orcos llegando a Eregion. Las legiones de Adar se encuentran expuestas a sol al llegar, ¿no es un poco incoherente con lo que nos dijeron la primera temporada? También nos presentan a un Adar que le habla élfico a Galadriel. Esto no lo comentamos en el anterior capítulo, pero es una de las cosas que menos encajan en el legendarium de Tolkien. Los orcos, como ya dijimos, es una raza que principalmente nace del odio contra todo lo puro, en especial contra lo élfico. Me cuesta ver a Adar hablándole en élfico a Galadriel, por mucho que antes de ûruk fuera elfo.
- Trama de Númenor
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Lo que no me esperaba era que mejorara tanto la trama de Númenor. Después de una coronación bastante deplorable, se desata la tormenta en Númenor. La diferencia está clara. Todo aquel que sea sirviente de la reina contra los seguidores de Pharazôn. La guerra civil ha estallado. Y me gusta por muchas razones. Aunque no coincida con los tiempos que dejó Tolkien en sus libros, lo que ocurre en Númenor es necesario para entender cuál fue el desenlace de la isla a mediados de la Segunda Edad.
Los hechos que ocurren en la isla, en los libros viene muchos años después de la forja de los Anillos. Sauron incluso tiene forjado el Anillo Único cuando se deja capturar por Númenor y va preso a la isla bajo la supervisión de Pharazôn. Poco a poco va cambiando su status, de preso a consejero del Rey, ya que tiene todos los conocimientos que sirven a Pharazôn para seguir creciendo en poder. Ese es el objetivo del Rey, tal y como muestra su declaración de intenciones en la apertura de la trama de Númenor durante este capítulo. Pharazôn envidia a los Valar y su inmortalidad. Va a ir a por ellos con todo.
Los Fieles, los seguidores del camino antiguo de los Valar, van a ser perseguidos por los leales a Pharazôn. En la serie nos deja varias escenas relativas a estos sucesos. La Guardia del Mar, los soldados de Númenor fieles a la reina, son degradados y obligados a esconderse por miedo a la persecución. La hija de Elendil, la que desata la tormenta acusando a la reina de usar la magia elfa, es la encargada de llevar a cabo con verdadero odio la tarea de aislar a los Fieles. Eso se mezcla con la lealtad que presenta la Guardia del Mar cuando Elendil es degradado de su figura de capitán.
El otro gran evento que lleva a al estallido de la violencia es lo que ocurre en el santuario. Los Fieles, que están venerando a los caídos de Númenor en su batalla en Mordor, son asaltados por Kemen, el hijo inventado de la serie de Ar-Pharazôn. Kemen suelta su odio por el camino antiguo y se dedica a provocar a los Fieles de cara a ver si alguien pica y le da excusa para hacer uso de su fuerza militar. El que pica es Valandil, que ha escalado mucho en mi lista de personajes favoritos (aunque sea forma muy efímera). Si Miriel había convencida a Elendil de que no había que enfrentarse a Pharazôn por el bien de la isla, dudo que el buen capitán lo haga, después de que Kemen atraviese con su espada a un Valandil que le había perdonado la vida segundos antes.
La forma en la que escala el conflicto y la seriedad con lo que lo han mostrado hace que la trama de Númenor madure a pasos agigantados. Aunque no se dan muchos detalles de como se llevara este conflicto, los tintes que adquiere esta historia recuerda mucho a la Alemania nazi con los judíos u otras historias parecidas. Las escenas, la carga de odio en las miradas, los vínculos familiares que se atreve a romper es arriesgado. Me intriga mucho como van a continuar con la trama, ya que si lo hacen bien puede ser una cosa muy seria. Pero de nuevo, si lo hacen bien, porque ya ha demostrado Amazon que cuando quiere la caga a lo grande.