Uno de los grandes animes que nos dejó la cosecha de 2019 fue ‘The Rising of the Shield Hero’. Este 2022 vuelve con un segunda temporada que promete y mucho. Esta obra, llevada al manga por Aneko Yusagi y adaptada por Kinema Citrus al anime, nos transporta a un mundo que combina un par de matices que me parecen muy interesantes. El primero es su apartado isekai, donde queda claro desde el primer capítulo que estamos hablando de un mundo diferente para todos los héroes. El segundo es elevar el tono de las historias MMO, consiguiendo más madurez en el desarrollo de personajes, de ahí que la demografía a la que va dirigida esta obra sea seinen.
‘The Rising of the Shield Hero’ nos cuenta principalmente la historia de Naofumi Iwatani, un otaku que ha sido invocado a un mundo desconocido como un héroe. No ha sido el único, 3 personas más van a ser invocados para poder poder formar el grupo de los Los 4 Héroes Cardinales o Legendarios. Estos héroes van a estar equipados con una única arma. Los otros héroes llevan espada, arco y lanza, mientras que a Naofumi le ha tocado el escudo, la única arma defensiva. El objetivo, luchar contra las Olas de la Catástrofe que asolan el reino.
Esta premisa ya es conocida y puede parecer de partida que estamos ante otro isekai más. Pero ‘The Rise of the Shield Hero’ tiene muchas sorpresas escondidas. La primera es la madurez de la obra de Aneko Yusagi. Naofumi, una vez investido héroe del escudo debe partir en busca de aventuras que le sirvan para coger experiencia y poder ser más eficiente a la hora de luchar contra las olas. Para ello ha de rodearse de un buen equipo. Su primer error, dejarse seducir por palabras de Malty Melromarc. El arco donde Naofumi es traicionado ya sienta la premisa de que esta obra es diferente y mucho más madura.
El echo de ser traicionado, de tener que empezar de cero, como si fuera un paria, en un mundo desconocido permite empatizar mucho con el personaje de Naofumi. Una vez que se ha entendido el mundo al que ha sido invocado y las alianzas que se van forjando, se disfruta del crecimiento del personaje. Explotando de una manera efectiva el potencial que puede ofrecer la estructura de los MMO a la hora de ganar experiencia, se puede comprobar que el niño Naofumi a cada momento se va convirtiendo en un hombre.
El otro punto a favor que tiene la historia es la de los personajes que comienzan a rodear al Héroe del Escudo. Principalemente habría que fijarse en Raphtalia, una delicia de personaje. Esta semihumana con forma de mapache es adquirida por Naofumi, que la cuida, le da cobijo y comida, y a cambio, Raphtalia pasa a ser el arma ofensiva de Naofumi, gracias a su gran manejo de la espada. Con un pasado duro, la liberación que siente al ser comprada por Naofumi se convierte en auténtica devoción y algo más. El grupo se acaba formando con Filo, una criatura con forma de ave que puede adquirir forma humana (de niña) y Melty, hermana de Malty, que traerá un poco la cardura de la familia real a la serie.
Una vez establecidos los puntos y las alianzas en concreto, otros dos puntos que ayudan a Aneko Yusagi a realizar un punto crítico. El primero es ver el resultado de la arrogancia en el desarrollo de los 3 Héroes Legendarios, cuyas armas son de ataque. Estos personajes se creen en la cúspide pero no acaban de encontrar su sitio, ¿puede ser una treta de Yusagi no acabar de explotarlos o realmente se quiere mostrar esta superioridad en el conocimiento del mundo de Naofumi? Mientras, Naofumi, gracias a su pasado otaku, entiende las premisas del mundo y sabe sacar provecho de todo lo que le rodea. Aunque también hay puntos en los que Naofumi llega al límite de sus habiliades.
Es en estos puntos donde la serie se vuelve un pelín más oscura. No todas las aventuras amargas se van a ver en las Olas de la Catástrofe. A medida que Naofumi va ganando experiencia necesita de retos mayores para poder progesar adecuadamente en su preparación como héroe. Estos retos le van a llevar a enfrentarse a criaturas que entrañan un gran peligro. El riesgo se asume y a veces tiene consecuencias, para él o para Raphtalia. El modo de compensación es esa ternura que irradia el personaje de Naofumi con las personas de su entorno más cercano. Otro punto en el que la obra de Yusagi es muy efectiva, en la crítica a la esclavitud, y a los sentimientos que pueden surgir de ello.
En mi opinión, donde más brilla la serie es gracias a la animación que ha puesto la gente de Kinema Citrus. Las escenas de las Olas de la Catástrofe esetán muy conseguidas y permiten disfrutar de una serie interesante de combates. Además cuenta con otro punto añadido muy importante, que es el de Kevin Penkin en la banda sonora. Es sencillamente delicioso escuchar la composición, ya que tiene un tema central muy potente y varios temas asociados a los personajes que cierran una banda sonora más que notable. Como nota curiosa, es indicativo que en el concepto del descanso Naofumi vaya a unas islas que se pueden identificar como Palma a esperar la gran ola de la catástrofe.
‘The Rise of the Shield Hero’ es una obra muy disfrutable, con una historia intersante y una buena ambientación y animación. Un cóctel muy bien conseguido de isekai de fantasía con puntos de MMO muy trabajados. Gran banda sonora y un season finale que deja con muchas ganas de esta segunda temporada que nos traerá Kinema Citrus este abril de 2022.
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