En la era de las franquicias parece que todo vale, y cualquier chispa es suficiente para revivir una saga … aunque esta hubiera parecido agotada. La chispa vital que da la vida a los Autobots parece que que no acaba de extinguirse por completo y eso permite que la saga de Transformers vuelva y se permita el lujo de explorar elementos distintos de los que Michael Bay nos trajo en su día. La saga de Transformers vuelve con fuerzas renovadas, cargada de acción, aventura y grandes batallas, con algo de misterio y una historia diferente a lo que estábamos acostumbrados.
Personalmente tengo que decir que la primera trilogía me gustó bastante, sobretodo las dos primeras películas. Se conjugaba el ambiente perfecto para Michael Bay, grandes explosiones, robots gigantes y había algo sólido detrás del guion. La segunda trilogía, en cambio, supuso un paso atrás en cuanto a la recepción del público, ya que no aportaba casi nada nuevo y se veía como se estiraba un chicle que cada vez tenía menos sabor. Había dudas de como iba a funcionar este nuevo lanzamiento, visto lo visto, a medida que pasan los días y las reviews, éstas se reducen.
En las plataformas digitales, sobre todo Netflix, siempre se apostó por la franquicia. En su serie de animación, donde se contaba la batalla por Cybertron, ya se pudieron ver los diseños de los Maximals. Esta película pretende ser el ancla entre las dos franquicias que en principio van a constituir la saga. La primera saga de Michael Bay ya se consideraría como cerrada. Esta nueva entrega, traída por Steven Caple Jr., cogerá los diseños de ‘Bumblebee’ para traernos una historia que intentará unir los dos mundos de nuevo.
Como todo inicio de trilogía, es clave tener un prólogo que permita situar el argumento de lo que se va a ver. En este caso tenemos a Unicron, una deidad de los Robots, tan grande como un planeta entero, que busca siempre planetas con energía (energon) para poder engullirlos y así poder sobrevivir. En el país de origen de los Maximals, una raza descendiente de los Autobots, llega Scourge, heraldo de Unicron, y el planeta cae bajo su sombra. Por suerte, un grupo de Maximals liderados por Optimus Primal consigue escapar, llevando consigo la llave de transcurvatura.
La amenaza llega a la Tierra, donde la historia se sitúa a mitad de los años ‘90. Antes de que Sam Witwicky tuviera contacto con los Autobots, Steven Caple Jr.va a proponer una pareja que demuestra bastante química. Noah Díaz es un antiguo soldado que vive de hacer trabajillos de electrónica para mantener a su familia. Un día, para dar un gran golpe, decide robar un coche, con la ¿mala? fortuna de coincidir con Mirage, un Autobot que le llevará a sumarse al equipo de Optimus Prime, como hiciera Shia Lebouf en su día.
Sin querer entrar a desgranar la película, tengo sensaciones encontradas. Por una parte, siempre es una gozada ver este tipo de películas en el cine, y más comprobar como se respeta el canon original ideado por Hasbro y Takara Tomy. A Optimus, Bumblebee y Wheeljack ya los conocíamos de las trilogías anteriores, pero la aparición de Arcee me hacía sospechar que el guion de Darnell Metayer y Josh Peters bebía de la fuente original, Transformers G1, la serie de animación de los años ‘80. Realmente es una opción a explorar muy buena la que tienen por delante, esperemos que no desaprovechen la oportunidad.
El problema que tiene ‘Tranformers. El Despertar de las Bestias’ es que se trata de la séptima película de la saga y a no ser que seas un ultrafan del género puede que te eche para atrás. Aporta cierto aire fresco la aparición de nuevas facciones hasta ahora desconocidas. Los Maximals y sobre todo los Terrorcons no los conocíamos en la gran pantalla. Liderados por Scourge, los Terrorcons son un grupo al servicio de Unicron y son más fuertes que los Decepticons. Emplearán trapos sucios, contaran con refuerzos (con perfiles robóticos muy familiares a Skorponok u otros Decepticons) y utilizarán armas hasta la fecha nunca vistas en la saga.
Afortunadamente el final de la película, acompañado de la escena postcréditos, propone una historia interesante y abre un melón que puede ser épico. Está todavía por confirmar que la nueva saga sea continua en el tiempo o de películas independientes, pero todo hace indicar que tendremos más robots en el cine. Me gustaría que se exploraran otras temáticas, como por ejemplo la de los Dinobots, pero para ello deberíamos de volver a los diseños del Transformers G1 original. Ya han demostrado que si quieren pueden hacerlo. La pregunta es si se atreven.
Puntúa el post
No veo entusiasmo, ni percibo en tus palabras nada que no hayamos visto ya en transformers. Para mí las tres primeras películas fueron sencillamente genuinas. La 4 y la 5 ya me costó verlas y si hay más no lo he visto.
Por lo que leo de tu post, soy de los que se bajaron del barco y no parece que vayan a subir de nuevo.
Al reves. De lo que se me lee en mi post, es que vuelve a la esencia de la original. Tiene acción y despliegue visual. Es muy difícil innovar, pero parece que lo van a intentar. Disfruté viéndola.