Nunca estudié en el colegio lo que pasó en Inglaterra mientras en España estábamos coronando a Isabel la católica. Hablo de finales del Siglo XV donde parece que no sólo en España se estaba escribiendo el futuro monárquico de un país. En el año 1485 En Inglaterra, se ponía fin a la guerra de las dos Rosas y se instauraba en el trono la dinastía Tudor, reyes hasta el día de hoy.

La Serie nos cuenta la historia de Isabel de York, hija del rey Eduardo IV e Isabel Woodville. Isabel era Amante de Ricardo III, su tío y rey provisional de Inglaterra desde 1483 hasta el año 1485, año en el que los Tudor lo ejecutaron y ganaron la corona de Inglaterra. Para afianzar el trono del primer Rey Tudor, Enrique VII se casó con ella y así unía dos casas que llevaban 30 años en guerra por el trono. La serie empieza en 1485 inicio del reinado de Enrique VII y nos cuenta cómo fue todo el reinado de esta singular pareja, que la serie quiere hacer ver que se acabó enamorando.

Cuando dí la oportunidad a esta serie de Starz, no sabía que me iba a sumergir en una etapa de la historia tan interesante, puede que esa componente histórica sea lo que más me ha gustado. Me encuentro ante una serie en la que hay una lucha por el poder donde lo más impresionante de todo, es que hay mucha verdad en lo que vemos. Obviamente es una serie de ficción y muchas de las cosas se han novelizado, pero por lo que he podido ver en la Wikipedia (en la que quiero confiar) todo el trasfondo histórico es cierto y por eso esta serie me ha encantado.

Toda una historia digna de juego de tronos. Ganar y perder apoyos, luchar por conservar la corona, unir en matrimonio a cuanta más gente mejor… Toda una serie de movimientos políticos que hacen de las personas, piezas de ajedrez en un tablero que es Inglaterra, cuyo único objetivo es la corona. Con esta trama tan bien construida a partir de hechos reales, nos sumergimos en una historia interesantísima que como cuenta con un ritmo muy correcto atrapa al espectador desde el minuto uno.

Si a la perfecta construcción argumental de los guionistas, le sumamos el buen trabajo visual con el que cuenta la serie, nos encontramos ante un producto digno de total visionado para disfrutar. A nivel de escenarios, decorados, vestuario y fotografía la serie es muy potente. Agradable, limpia y estilosa un punto a favor en una serie medieval en donde lo que se ve por lo ojos debe ayudar a sumergirse en esa época. Aquí Starz no decepciona y cumple con nota.

La otra parte que entra por los ojos es el reparto. Sólo conocía a Michelle Farley que interpretó a Cathelyn en Juego de tronos y que podríamos decir que hace el mismo papel aquí. El resto de reparto es nuevo para mí, pero debo decir que me ha encantado cada uno de ellos. Judie Comer y Jacob Collins-Levy se comen la pantalla como pareja principal, pero los secundarios como Vincent Regan (Jasper Tudor) o Eassie Davis (Isabel Woodville) son elementos potentísimos en el despliegue de esta historia, en la que lo importante es la política que le rodea.

En una época en la que el consumo de series ha ganado tanto peso, creo que White Princess en por mucho un producto a ver para disfrutar y por otro lado para conocer un capítulo de la historia que para mí era desconocido. La tenéis entera disponible en HBO.es y la recomiendo ferviertemente.

Dirección

Guión

Reparto

Dirección artísica

Clase de historia

Puntuación

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